Páginas

Buscar este blog

viernes, 12 de agosto de 2011

El gato somali

Raza originaria de Inglaterra, el gato somalí es el resultado de una mutación de genes de pelo largo introducidos a la raza abisinia a principios del S.XX. Era frecuente que aparecieran algunos gatos de pelo duro en las camadas de Abisinios. Los criadores descartaban estos ejemplares hasta el año 1960, año en el que criadores canadienses empiezan a mostrar interés por estos gatitos. Esta nueva raza fue bautizada como Somalí, por su semejanza con Somalia.
La belleza de este gato radica en la mezcla de aspecto salvaje que tiene, junto con la estructura y el porte elegante de las razas de gatos orientales. En general, el gato somalí es un gato de tamaño medio y pelo semilargo.
La cabeza de esta raza es ligeramente redondeada, afinándose en un alargado hocico. Sus orejas puntiagudas son anchas en la base. Y sus ojos, grandes y almendrados, pueden ser de color cobre, dorado o incluso verdes. Estos ojos destacan mucho porque los párpados son muy oscuros.

Gato Somalí


El pelaje es denso, suave y medianamente largo. Existen tres variedades de manto: el rojo, el dorado y el azul. Aunque su pelaje es largo, esta raza no soporta bien el frío y necesita especial cuidado en ese aspecto. Es propenso a enfermar si se ve sometido a temperaturas fuera de lo común para ellos.
Los gatos de esta raza son gatos inteligentes y llenos de vitalidad. Les encanta jugar y participar en actividades. Además, son bastante traviesos. Son gatos que no llevan bien el vivir en casas pequeñas sin opción a moverse y desfogarse: les gusta la libertad.
Aunque llega a ser un gato cariñoso y mimosón con sus dueños, es algo introvertido y le costará tiempo mostrarlo. Pero cuando esté seguro y confiado será un gato muy amable y cariñoso. Aún sí, puede que a veces se muestre desconfiado.

Razas de gatos: gato Somalí

No hay comentarios:

Publicar un comentario